Si hay un elemento en la decoración que sobrevive al paso del tiempo, es sin duda alguna el papel pintado. Esta técnica se popularizó en Inglaterra con la Revolución Industrial y desde entonces ha sido un recurso decorativo imprescindible. Su auge fue en los años 70 dónde los diseñadores han dado rienda suelta a su imaginación, llenando las casas con papeles de colores vivos y diseños atrevidos.
Hasta hace poco tiempo, la tendencia minimalista en decoración parecía haber acabado con el empapelado, pero nada más dista de esta realidad. La revolución digital y los nuevos materiales del siglo XXI, han propulsado aún más su desarrollo, tanto es así, que hoy en día vuelven a tomar cuenta de nuestros hogares con un aire completamente renovado.
Reconozco que nunca fui muy afin a esta tendencia, pero también tengo que decir que hay una variedad tan grande de estilos que van desde los románticos de las firmas inglesas Designers Guild y Laura Ashley, los murales italianos de Wall&Deco o franceses Papier de Paris, la elegante de Gournay, los motivos geométricos de la marca sueca Engblad&Co o industriales de la marca holandesa NLXL hasta los contemporáneos españoles Coordoné y Gastón Daniela … de los que es imposible no enamorarse. Además, por más sencillo que sea su patrón, producen un efecto impresionante, llenan de alegría y carácter cualquier habitación.
Así que hoy os dejo unas imágenes inspiradoras para que veáis cómo decorar con este material que vuelve a estar tan de moda en nuestros hogares.
Me encantan los murales de Wall & Deco, son muy contemporáneos y originales.
Papeles con relieves ó tonalidades neutras, como el blanco son muy fáciles de combinar y dan una aspecto sofisticado al espacio.
Actualmente, los motivos industriales que simulan materiales y paredes inacabadas se han puesto muy de moda. Algunos son preciosos, pero aún no me he atrevido con este estilo, probablemente porque aquí, salta mi lado de arquitecta, que siempre busca la veracidad de los materiales.
Los geométricos dan mucho dinamismo al espacio, así que con empapelar un pequeño rincón de la habitación ya es suficiente.
¿Y porqué no revestir tu pared con una sopa de letras? ¿No os parece una idea genial?
Los papeles pintados ya no son solo exclusivos del salón y dormitorios. Hay una línea que son resistentes a la humedad, pensados para espacios tan delicados como cocinas, baños e incluso fachadas ó muros exteriores. Dan un toque diferente, divertido y acogedor a estos espacios que siempre suelen ser muy funcionales.
¿Qué os ha parecido? ¿Os atrevéis a empapelar vuestras paredes?
Hay miles y miles de opciones, debéis de buscar un patrón que se adecue a vuestro estilo. Atrévete, te aseguro que te sorprenderás con el efecto que producen en cualquier espacio.
LA HABITACIÓN DE ANA 